Seguro de viaje.

Cuando se planifica viajar hay que pensar si es necesario contratar seguros de viaje. Existen situaciones que pueden hacer que debamos cancelar el viaje, volver a casa antes de tiempo o buscar atención médica al estar viajando. Un seguro de viaje puede proporcionar esa protección extra que necesitamos. Antes de comprar la cobertura del seguro de viaje, hay que revisar la póliza de los seguros que tengamos (si es que se posee alguno), para evitar cualquier confusión o superposición de cobertura de riesgos. Los artículos de cierto valor como cámaras de video, computadora personal, electrodomésticos, artículos de joyería, arte, ropa y demás, pueden estar cubiertos por el seguro de la casa por ejemplo, por si fueran robados durante nuestra ausencia. Respecto al caso de que la aerolínea pierda nuestro equipaje ya registrado, tiene la obligación de darnos un reembolso por las maletas (hasta por una cierta cantidad de dinero). O si nos enfermamos o sufrimos alguna lesión al viajar, el seguro médico personal puede cubrir el monto de los costos médicos. En las pólizas de seguros de viajes se incluyen por lo regular varios tipos de protección que debemos tener en cuenta y diferenciar bien respecto a cualquier otro seguro que tengamos. Asegúrate de leer lo que está escrito en letra más pequeña: éstas establecen si el seguro de viaje cubre lo que suponemos que cubre. Las pólizas y las compañías de seguro varían en su cobertura, así que asegúrate de preguntar cualquier duda que tengas. Algunos de los diferentes tipos de seguro disponibles incluyen: -Cancelación/interrupción del viaje (TCI por sus siglas en inglés): si los planes se ven alterados de pronto y tienes que cancelar o dar por terminado tu viaje antes de tiempo, TCI te cubrirá por todo esto. Pero solo te reembolsará en caso de que tengas un motivo incluido en la lista del seguro, como por ejemplo lesión, enfermedad, muerte propia o de algún miembro de la familia, de un compañero de viaje o socio. -Algunas pólizas incluirán únicamente algún motivo de tipo médico y otras no cubrirán condiciones médicas pre-existentes. Insisto que es muy importante leer lo que está escrito con letra más pequeña. -Traslado por emergencia médica: Si te tomas unas vacaciones tipo aventura o a una zona alejada de un centro hospitalario que cuente con todo lo necesario, sería buena idea comprar este tipo de cobertura. Si el tratamiento adecuado no se encuentra disponible en un hospital local, serías transferido a la instalación médica apropiada que se encuentre más cercana. -Pérdida de equipaje: Esta cobertura te reembolsa por la perdida o daño a tu equipaje. Antes de empacar, asegúrate de hacer una lista de todo, pues si pierdes tus maletas, se te hará el reembolso de una parte de su contenido, más no de todo. Lee lo que esté escrito en letra más pequeña. Entérate exactamente de qué tipo de cobertura estás o no estás recibiendo. -Considera adquirir tu seguro de viajes de una companía independiente, en vez de comprarla de tu operadora de viajes o de cruceros. -Pretégete aún más, pagando con una tarjeta de crédito. La protección por pérdida de equipaje es necesaria únicamente si llevas en tus maletas artículos con un valor mayor a los $2,500. Verifica la póliza de tus otros seguros, si es que los posees. No olvides preguntar (y anotar) cuáles son los pasos a seguir si surge un imprevisto y debes hacer valer el seguro contratado. ¿A qué número telefónico llamar o dónde debes dirigirte? ¿Qué documentación deberás tener a mano en tal caso? Trata de evitar ser engañado por publicidades o folletería. Debes guardar comprobantes de todos los gastos que realices para poder exigir el reembolso (si es que corresponde) cuando regreses a casa. Finalmente, antes de firmar el contrato de tu seguro de viaje recuerda que te debe quedar claro que es lo que se va a asegurar y que alcance tiene esa cobertura.